martes, 25 de octubre de 2011

Arroyomolinos 1811-2011. Conferencias.


El programa de actos comienza el miércoles 26 con una serie de conferencias y exposiciones; a partir del viernes 28, y hasta el domingo 30 se desarrollarán una serie de actos, lúdicos, conmemorativos, folklóricos y oficiales en conmemoración de la batalla. Así el viernes se inaugurarán monumentos en honor de los combatientes y de los británicos del "Border Regiment" y , izado de banderas, recreaciones, etc. El programa es intenso y muy trabajado
Desde el miércoles habrá las siguientes conferencias (por orden de fecha y hora)
"La guerra de la Independencia en Extremadura", Álvaro Meléndez.
"El brigadier Pablo Morillo", José Antonio Pérez Rubio.
"Abastecimiento de tropas en la Guerra de la Independencia",César Rina Simón.
El jueves:
"La sorpresa de Arroyomolinos. Una estrategia perfecta", Sara Fragoso, además coordinadora de actos y una de los organizadoras de los eventos.
"Papel del ejército portugués en la batalla de Arroyomolinos", Nuno Lemos Pires.
"Papel del ejército británico en la Sorpresa de Arroyomolinos, Charles J. Esdaile.
El viernes:
"La participación del pueblo de Alcuéscar en la sorpresa de Arroyomolinos", Ignacio Pavón.



Batalla de Arroyomolinos 1811-2011

Del 26 al 30 de este mes de octubre se conmemorará la batalla de Arroyomolinos en su Bicentenario, ganada por los aliados británicos, portugueses y españoles a la División francesa del General girard, sorprendido al amanecer del día 28 en dicha localidad.
Traigo a continuación el informe completo del general español que mandaba nuestras fuerzas en aquella ocasión, es la mejor manera de conocer los hechos. El general Girón da parte al General castaños, Capitán general de las fuerzas españolas del Ejército de Extremadura, en aquella fecha ya denominado 5º Ejército:

En consecuencia de las órdenes de V. E. salí el 23 del presente de ese cuartel general para tomar el mando de las tropas de este exercito, que debían operar en unión con las del Excmo. Sr. General Hill, comandante en gefe del exercito aliado del Alentexo, y el 24 conseguí este objeto en el pueblo de la Aliseda, donde acababa de llegar el señor general Hill, y estaba desde el día anterior el Mariscal de Campo Conde de Penne Villemur con la vanguardia de su mando. Los enemigos se hallaban en Cáceres y ocupaban a Arroyo del Puerco con 300 caballos

El 25 al amanecer salió el general Conde de Penne con su caballería a hacer un reconocimiento sobre Arroyo del Puerco, y a su vista evacuaron los enemigos aquel pueblo y se retiraron al de Malpartida.

El conde de Penne permaneció en el Arroyo.

El Sr. General Hill determinó aquel día marchar en la madrugada del siguiente a atacar a Malpartida con dos brigadas de su infantería, toda la nuestra, y la caballería de ambas naciones.

El 26 a las dos de la madrugada nos pusimos en movimiento con un fuerte temporal, más a pesar de él, y de la noche, se marchó tan bien, que al romper el día estuvimos en disposición de atacar el pueblo de Malpartida, concurriendo con la mayor precisión la coluna del general Conde de Penne, que había marchado desde el Arroyo, más los enemigos habían evacuado el pueblo y retirádose sobre Cáceres poco después de media noche. El Conde de Penne con su caballería y 200 húsares ingleses siguió hasta aquella ciudad, sostenido por la infantería española al mando del 2º comandante general de la vanguardia, el brigadier Don Pablo Morillo. El resto de la caballería británica, la infantería y artillería aliada permanecieron en Malpartida.

El general enemigo, Girard, que se hallaba en Cáceres con la división de su mando, se puso en retirada así que por su caballería avanzada supo nuestro movimiento, y por más que la española y aliada del mando del general Conde de Penne se esforzó en alcanzarlo en su marcha, solo se tiraron algunos tiros entre nuestros descubridores y los tiradores de la retaguardia enemiga. Girard marchó aquel día a Torremocha y el Conde de Penne permaneció en Cáceres con el grueso de su vanguardia.

El 27 antes del día, la caballería inglesa de Malpartida marchó sobre Alcuéscar y el general Conde de Penne tomó la misma dirección desde Cáceres con la vanguardia de su mando. A las ocho de la mañana siguió la infantería y artillería aliada el movimiento de la caballería y todas las tropas se reunieron al anochecer en el pueblo de Alcuéscar.

Al llegar a él supimos, con no poca admiración, que la división del general Girard se hallaba en Arroyo-Molinos, lugar situado a una legua corta de Alcuéscar, de lo que cerciorado el señor general Hill dio sus disposiciones para atacarlo a el amanecer del día siguiente.

A las dos de la madrugada del 28 se pusieron las tropas en movimiento con este objeto: el tiempo era horrible; pero la mucha lluvia, y el fuerte viento que nos daba de espalda, nos fue sumamente favorable. Las tropas marcharon con precisión, no obstante la dificultad que presentaba la noche y el temporal, y antes del día el Sr. General Hill estaba dirigiendo la formación de las colunas de ataque en una hondonada, a muy corta distancia del pueblo de Arroyo-Molinos: una columna de infantería aliada, con la que iba la artillería, marchó directamente al pueblo: otra, formada por la infantería española y que mandaba el brigadier Don pablo Morillo, se dirigió a flanquear el lugar por su izquierda y otra coluna de infantería aliada tomó su dirección por la derecha para cortar a el enemigo los caminos de Mérida y Medellín, y partir a tacarlos de aquel punto. Nuestra caballería, mandada por el general Conde de Penne Villemur, marchó por la derecha de esta última coluna y la caballería británica tomó su dirección sobre la izquierda de esta misma coluna: en esta disposición y en el más bello orden posible, nos adelantamos sobre el pueblo y a pocos momentos avistamos a el enemigo, que apenas acababa de salir de él por el camino de Mérida: verlo, atacarlo sin disparar un fusilazo, batirlo, dispersarlo completamente y acabar con él fue la obra de un momento; nada iguala al arrojo y valor de las tropas españolas y aliadas que se emplearon en esta operación y a esto se debe que el enemigo, aunque totalmente sorprendido, formado y en marcha, no tuvo lugar de tomar ninguna disposición, ni pudo hacer otra cosa que huir, rendirse o morir.

El general Girard, con alguna parte de su infantería, logró tomar una sierra muy inmediata al camino; pero perseguido en ella con el mayor ardimiento por toda mi infantería y parte de la aliada, cuasi toda la suya fue muerta o hecha prisionera en el discurso del día, y él mismo huyó herido por la sierra, con solo un puñado de hombres, siendo posible caiga aún en nuestras manos.

La caballería española y aliada cargó primero y persiguió después en todas direcciones al enemigo con el mayor ardor, no dándole tiempo en parte alguna para volver en sí ni pensar en rehacerse.

El resultado total de esta gloriosa acción, ha sido hacer al enemigo 1400 prisioneros, entre ellos el príncipe duque de Aramberg, coronel del 27 cazadores de a caballo, al general de brigada Bronk, al gefe de estado mayor de la división, Hidry, dos comandantes y 30 oficiales: dexar sobre el campo como 400 hombres, entre ellos al general de brigada Dembousi y 20 oficiales, apoderarnos de toda su artillería que consistía en dos cañones, un obús y 6 carros de municiones, sin faltarles ni un solo caballo de su tren: una insignia tomada por las tropas británicas y por las de mi mando la bandera del quarto batallón del regimiento número 40 de infantería de línea que tengo el honor de remitir a V. E., y últimamente un sinnúmero de fusiles, sables, mochilas, caballos y todo el bagage y equipage de la división, sin excepción de una sola maleta. Los enemigos han perdido también un águila, pero no ha sido posible hasta ahora el encontrarla.

Tal ha sido, excmo. Sr., la feliz jornada de Arroyo-Molinos, en que ha quedado totalmente destruida, o más bien ha dexado desistir la más florida división del exercito del medio día de España: el simple relato de esta acción y movimientos anteriores a ella bastará para que cualesquiera militar haga la debida justicia a los profundos conocimientos que el Excmo. Sr. General Hill ha desplegado en el discurso de esta operación y a que se ha debido la gloria de una ventaja tan señalada y tan completa; pero es menester haber estado allí para apreciar en su justo valor, la disciplina, la bizarría y el ardor de las tropas británicas, de sus dignos generales, gefes y oficiales superiores a todo elogio.

V. E. verá por los partes originales del mariscal de Campo, conde Penne Villemur y brigadier D. Pablo Morillo, que tengo el honor de remitirle adjuntos, la mucha parte que en esta gloriosa acción tuvieron las tropas españolas, que llevadas al combate por gefes tan sobresalientes y distinguidos, no pudieron menos de llenar todos mis deseos, y corresponder altamente a la justa opinión que han sabido ganarse en los campos de batalla.

Quando se remita la noticia de los individuos que se distinguieron en esta acción, pediré a V. E. la eleve a conocimiento de S. A. S. el Consejo de Regencia, para que no queden sin premio: yo mientras tanto no puedo menos de recomendar a V. E. al mariscal de campo Conde de Penne- Villemur, comandante general de la vanguardia, cuyo mérito militar es bien conocido, al brigadier D. Pablo Morillo, segundo comandante general de la misma, tan distinguido por su valor y actividad, y al coronel comandante de la Legión Extremeña D. Juan Downie, que en cada ocasión da nueva muestra de su brillante bizarría.

Los ayudantes generales de Estado mayor D. José Ezpeleta, brigadier de los Reales exercitos, y D. Pasqual Enrile, que me han acompañado en esta expedición, han dado tantas pruebas de su celo y capacidad militar en el discurso de esta operación, quanto han manifestado en la acción el valor que tienen tan acreditado. Los ayudantes de v. E., el teniente coronel D. Nicolás de Santiago y el capitán D. Tomás Mateos que V. E. se sirvió poner a mis órdenes, no me han dexado nada que desear por su actividad y bizarría. Estoy igualmente satisfecho de los servicios de mi ayudante de campo el teniente D. Estevan Cortijo y el de igual clase D. Antonio Mercado, empleado en este Estado mayor y ruego a V. E. lo haga conocer así a S. A. S.

Nuestra pérdida ha sido tan corta que no pasará de 20 muertos y 100 heridos, en todas las tropas tal ha sido y tal será siempre el resultado de ataques decididos que una sabia combinación ha sabido preparar, pudiendo V. E. tener la satisfacción de que su exercito ha contribuido de un modo muy gloriosos a la victoria más completa que se puede conseguir sobre una tropa.

No debo dexar ignorar a V. E. las repetidas pruebas de deferencia y particular consideración que he merecido constantemente al Excmo. Sr. General Hill, ni callar la satisfacción con que he visto el ardiente interés que este digno general y todo su exercito toma por la causa sagrada en que estamos empeñados.

Dios guarde a V. E. muchos años. Cuartel general de Mérida 30 de Octubre de 1811 = excmo. Sr. = Pedro Agustín Girón = Excmo. Sr. D. Francisco Xavier de Castaños.

lunes, 10 de octubre de 2011

Exposición "El Regimiento "Castilla" en la Campaña de Ifni-Sáhara"

Para una rápida información, os copio la Nota de Prensa que hemos remitido a los medios de Badajoz:

"La Asociación Cultural “Voluntarios de Castilla” organiza, una exposición de fotografías: “El Regimiento Castilla nº 16 en la Campaña de Ifni-Sáhara 1957-1958. Memoria de África”, en la sala de exposiciones del Palacio de la antigua Capitanía General de Extremadura, en Badajoz, plaza de López de Ayala, durante los días 14 al 23 de octubre, ambos inclusive, y en horario de 11’00 a 14’00 y de 17’30 a 20’30 horas.

No obstante, el día 14 permaneceremos a disposición de los Medios de Comunicación Social que lo estimen oportuno, en la sala de exposiciones desde las 10’00 horas; llevándose a cabo la apertura de la muestra al público a las 12’00 horas, sin acto protocolario alguno, con la presencia de antiguos combatientes y familiares que han cedido fondos fotográficos, a los cuales la Asociación Cultural “Voluntarios de Castilla” agradecerá públicamente su colaboración.

Para la ejecución de esta muestra la Asociación ha contado con las ayudas aportadas por el Ministerio de Defensa y la colaboración del Regimiento de Infantería “Castilla” nº 16.

El conflicto de Ifni, “la guerra olvidada” o “la guerrita”, como fue llamada en ocasiones, se desarrolló entre octubre de 1957 y abril de 1958, cuando bandas armadas procedentes de Marruecos, atacaron los puestos de la zona española de Ifni y del Sáhara, que formaban el África Occidental Española. Además de las fuerzas desplegadas en el territorio, que habían sido reforzadas con unidades de La Legión y la recién creada Bandera Paracaidista, se llevaron a la zona fuerzas de Infantería como el batallón Expedicionario del Regimiento de Infantería “Castilla” que hoy recordamos.El Batallón “Castilla” formado en su gran mayoría por soldados de reemplazo extremeños, entró en combate en diversas ocasiones y sufrió bajas: el sargento Serrano Leite, el cabo 1º González González y el soldado Del Río Menayo, murieron en combate y alrededor de una quincena de hombres resultaron heridos. Han pasado 55 años y apenas queda memoria en nuestra ciudad por eso nuestra Asociación, entre cuyos fines está el estudio y la divulgación de la Historia militar extremeña y de nuestro Regimiento ha organizado esta modesta exposición.

Es el primer paso para agradecer públicamente a estas personas y sus familias el sacrificio llevado a acabo. Hemos conseguido reunir unas 150 fotografías de esta época y de las posteriores expediciones al Sáhara en 1961, 1962 y 1963, de las que serán expuestas en cuadros unas cincuenta y el resto pasarán digitalizadas por el proyector de la sala.

Queremos iniciar así la formación de Archivo documental sobre la vida militar en Extremadura, y en especial del Regimiento “Castilla”, apodado “El Héroe” por su comportamiento en el Sitio de Zaragoza, ahora hace 200 años.

El “Castilla” que llegó a Badajoz en 1883, y dio guarnición a las más importantes localidades de nuestra región, es la Institución militar decana en nuestra región."